Pablo Barrero será el representante del bloque del Frente de Todos en el Consejo de la Magistratura y el lugar suplente será ocupado por Marcelo Mango, tal como se resolvió el sábado en una reunión de esa bancada de la oposición, donde además confirmó el restos de los cargos del bloque presidido por Maru Martini y los puestos de la oposición en la Legislatura, como la vicepresidencia 2da de Alejandro Marinao.

El debate por la representación del FdT en la Magistratura, desnudó los posicionamientos internos del bloque y sus correlatos dentro del peronismo rionegrino. Ese lugar lo ocupó el año pasado Nicolás Rochas, quien supo ser alfil del sorismo y que perdió la confianza en el círculo íntimo roquense, y funcionó como suplente Alejo Ramos Mexía, que eligió un camino distante del resto del encuadramiento político de los legisladores y se convirtió en un referente del massismo a nivel provincial.

El sector que responde a Martín Soria, encabezado por José Luis Berros, reclamó el lugar de Rochás, con destino preciso para Pablo Barreno, a su vez Nicolás Rochás contaba con los votos necesarios para continuar este año en el Consejo de la Magistratura.

¿Qué pasó? La intransigencia de Rochas llevó a una negociación entre sectores, ya que pretendía que su designación fuera votada por unanimidad de los legisladores. Imposible.

Además tampoco quiso negociar el cargo de suplente de Ramos Mejía. Su posición fue irreductible: por unanimidad y fórmula completa. En política ese proceder y la derrota van de la mano.

Así llegó la designación de Pablo Barreno, con una ayuda que le dio la Justicia, al imputarlo por una denuncia de la jueza del STJ, Liliana Piccinini. Una torpeza que ya tuvo sus primeras consecuencias en el Consejo de la Magistratura, donde el sorismo desde la minoría se quedó con el cargo.

Según trascendió, la lealtad de Rochas hacia Ramos Mejía podría incorporarlo al massismo rionegrino.

Fuente: ADN.