PRIMERA DECLARACIÓN REMOTA EN CÁMARA GESELL
Así como al comienzo de la pandemia por el coronavirus, la Justicia provincial estuvo entre las pioneras en realizar audiencias de formalización por Whatsapp, y luego dispuso que testigos e imputados declaren en juicios por videollamadas desde comisarías y juzgados de paz y hasta desde alcaidías, respectivamente; ahora se produjo otra novedad: por primera vez la declaración de una menor en Cámara Gesell se hizo en forma remota.
La audiencia se llevó a cabo en el Centro Judicial de Santa Rosa por vía Zoom, estuvo organizada por la Oficina Judicial de Santa Rosa y se trató de una prueba jurisdiccional que fue incorporada al expediente.
En ella, la jueza de control, María Florencia Maza, participó a distancia, en la modalidad teletrabajo; mientras que el fiscal Walter Antonio Martos; la defensora oficial María Silvina Blanco Gómez, la asesora de Niñas, Niños y Adolescentes, María Gabriela Manera; y la psicóloga forense María Laura Cabot lo hicieron en forma presencial, respetando el distanciamiento social.
Sin duda que la pandemia por el coronavirus modificó la forma de prestar el servicio de justicia –al implementarse los sistemas de turnos y el uso intensivo de plataformas virtuales como Zoom y Whatsapp para evitar las audiencias presenciales–; aunque ello no lo interrumpió, sino que, por el contrario, lo agilizó al completarse el proceso de digitalización absoluta de expedientes con el funcionamiento a pleno del Sistema Informático de Gestión de Expedientes (SIGE) en los fueros civil y comercial; laboral; de familia, niños, niñas y adolescentes; de ejecución, concursos y quiebras; contencioso-administrativo; y en el Juzgado Letrado de 25 de Mayo.
De hecho, en los dos primeros meses –desde que se aprobó el uso obligatorio para operadores internos y externos el 1 de julio– al SGE ingresaron alrededor de 70.000 actuaciones; es decir cada una de las actividades desarrolladas por los juzgados o las partes intervinientes en el proceso (presentación y contestación de demandas, citaciones, providencias, escritos, notificaciones, etc.).
Como en el fuero penal ya venía usándose el Sistema Informático de Gestión de Expedientes Penales (Sigelp), La Pampa pasó a ser a mitad de año, junto a San Luis, una de las dos únicas provincias en tener todos los fueros digitalizados; lo que permitió claramente acelerar la tramitación de las causas.
Ambos sistemas fueron creados por desarrolladores propios del Poder Judicial. Se trató de un proceso gradual, respaldado siempre con decisiones institucionales del Superior Tribunal de Justicia, que no solo sirve para agilizar los tiempos procesales; sino además para evitar el trasladado innecesario de un abogado –por ejemplo,, para entregar un escrito– o de un ciudadano –para brindar una declaración testimonial– desde largas distancias.
De esta manera, como ocurrió con esta primera audiencia a distancia de una Cámara Gesell, el cambio de paradigma en la tramitación de los expedientes, permitió –entre otros beneficios– optimizar los tiempos, mejorar la custodia de los legajos, darle inmediatez a las notificaciones, descongestionar las mesas de entrada de todos los organismos, centralizar la información y ahorrar insumos.